domingo, 25 de noviembre de 2012

Capitulo 47 Handle with care


Sentada en el avión, al lado de Paul, miraba por la ventanilla. Después de su tormenta con Brian, las cosas habian mejorado un poco. Por lo menos podía viajar con ellos en el regreso a casa y, siempre simulando, los últimos días de la gira los había acompañado en actuaciones o entrevistas.
El asunto de los anónimos estaba casi solucionado. Según Brian, eran producto de los empleados de los hoteles, que siempre se pasaban de chismosos. Había hablado con el dueño del último hotel, que advirtió a sus empleados y no apareció mas ningún papelito misterioso. La hipótesis se conformaría cuando la gira terminara, sino volvía a aparecer ningún anónimo mas, sería cosa de los hoteles.
-¿Estás bien? –preguntó Paul.
-Si, si, sólo pensaba.
-¿En qué?
-Que curioso sos –rió –Pensaba que las cosas mejoraron un poco.
-Es verdad. Y mejorarán mas cuando lleguemos a casa -le dio un beso rápido.
-¡Paul! ¡Que nos pueden ver!
-Ay pero si sólo fue un besito –contestó el haciéndose el inocente.

Pasaron dos días donde lo único que hicieron fue dormir, aprovechando el tiempo que les habían robado en la gira. Después, hubo que volver al trabajo.
-¡Eva! –gritó Jenny ni bien la vio –Que...que bien que estás...-dijo mirando a todos lados.
-Ah si, si, estoy mucho mejor –Eva trató de aguantarse la risa.
-Esta noche te invito a cenar con Anne. Y nos contás todo, todo. ¿Te parece bien?
-Buenísimo ¡reunión de chicas!
-Eva, ¿cómo estás?
Se giró y se encontró nada menos que con el director de la revista.
-Ya estoy muy bien, y lista para volver a trabajar.
-Excelente, ésta tarde acompañarás a los muchachos, entrevistarán a los Kinks.
Se sintió un poco nerviosa al oír eso, temía encontrase con Dave Davis y que volviera con sus sospechas, pero no le quedaba mas remedio.

El resto de la mañana lo pasó junto al trabajo atrasado que tenía. Legó la hora del almuerzo, pero Jenny estaba muy atareada, asi que Eva cruzó al bar de enfrente, donde siempre comían. No alcanzó a llegar, cuando se cruzó con un hombre que le pareció reconocer. Se giró  y se percató de que el hombre que la miraba. Se acercó a ella.
-Eva, ¿cómo estás?
Abrió grande sus marrones ojos. Por nada del mundo esperaba volver a encontrarse alguna vez con Joseph.
-Ho...hola Joseph. Estoy bien.
-Necesito ver a Jenny.
-¿Para qué? –preguntó, poniéndose  a la defensiva.
-Por favor....confirmame que sigue trabajando acá enfrente.
-No te voy a decir nada. Debo irme, se me hace tarde.
-Decile que la necesito. Me divorcié, al fin. Quiero que vuelva conmigo.
-No soy tu mensajera. Decile vos cuando la encuentres algún día.
Entró al bar y pidió el teléfono. Desde allí se comunicó con su amiga.
-Jenny soy Eva.
-Hola, tanto tiempo –rió la chica.
-Tengo que contarte algo. Me encontré con Joseph. Te está buscando, está en la puerta del edificio.
No escuchó nada mas, hasta que un ruido seco cortó la comunicación. Devolvió el teléfono y se sentó en la mesa de siempre. Por la ventana vigiló a Joseph y rogó que su amiga no hiciera ninguna locura. Sabía lo mucho que lo había querido, y no estaba segura de que hubiera dejado de quererlo. Si volvía con él se arruinaría la vida.


Su turno de tarde comenzó, intentó hablar con Jenny pero estaba muy ida, distante. Sabía que no se habia encontrado con Joseph, pero saber que la buscaba seguramente la había perturbado.
Esperaba junto a los entrevistadores en la casa de los hermanos Davies, donde se realizaría la entrevista.
-Hola Eva –saludó Dave. Lo vio con un aspecto y actitudes burlonas y sarcásticas, y así respondió a las preguntas.
Cuando todo finalizó, suspiró aliviada, había sido algo incómodo para todos.
-¿Cómo estás?
-Estoy bien Dave, gracias –contestó indiferente, mientras guardaba la cámara.
-¿Sabés? Tengo novia. Y...otras chicas mas. No necesito mujeres que se acuestan con beatles.
-¿Pero qué decís? –lo miró, escandalizada.
-¿Me va  a decir que no es verdad?
-Claro que te lo digo. Y otra cosa, me importa un rábano tu vida privada. No me molestes.
-Si, claro....
-Sos un histérico con la fama en la cabeza. ¿Porque una te dijo que no le inventás toda una historia?
-Ya te dije que digo la verdad. Sos asistente, todas las asistentes se acuestan por lo menos con dos de la banda. Sos una groupie, Eva querida.
Se colgó su bolso, indignada, y se fue junto a sus compañeros que la llamaban. En el viaje en camioneta, de regreso a las oficinas de la revista, no pudo sacarse de la cabeza lo que Dave le había dicho. Después de todo, tenía toda la razón.


John y George la miraron serios. En verdad, ni siquiera había pensado en como lo tomarían, era algo muy inocente y simple.
-¿Qué pasa? –peguntó con inquietud.
-Las “cenas de chicas” siempre me resultaron raras –respondió George.
-Chicos solo vamos Jenny, Anne, y yo. Hace mucho que no tenemos una charla entre las tres.
-Pero nosotros planeamos una super cena, ahora que por fin volvió todo a la normalidad –dijo John.
-Yo...no sabía.
-Hacé lo que quieras –George subió la escalera.
-¿Qué le pasa? –le preguntó a John.
-Tiene razón.
-Oigan no seas tan celosos, sólo es una cena –John no la escuchó, solo imitó a George y se fue.
-¿Pasó algo? –preguntó Ringo entrando desde la cocina.
-John y George se enojaron –respondió molesta.
-Ah...¿por la cena con tus amigas?
-Si. ¿Vos también? –lo miró con enojo, pero el chico sólo le dio una sonrisa dulce.
-Claro que no. No tengo motivos para enojarme –la tomó de la cintura y le plantó un gran beso.
-Veo que sos mas vivo que los otros dos –le dijo ella con picardía.
-Por supuesto, ¿tenías alguna duda?


En la cena, hablaron de todo, pero Jenny se veía incómoda, hasta que, presionada por las preguntas, decidió hablar.
-Me encontré con Joseph. Salí con la excusa de ir al bar para hablar con él.
-¿Y? –preguntó Anne.
-Me habló. Se separó de su mujer. Y...quiere volver conmigo.
-Pero vos estás con Patrick, y estás bien. Quiero imaginarme que lo querés.
-Si Anne, lo quiero pero....con Joseph viví muchas cosas.
-¡Por favor Jenny! –exclamó Eva –Ese tipo te usó, te jodió muchos años.
-Mirá quien habla. ¿Pensás que terminarás bien cuando todo se acabe con tus cuatro?
-¡No hay puntos de comparación!
-Chicas, no peleen por favor –Anne intentó calmar los ánimos –Jenny, pensá un poco. Eva tiene razón en algo, te arruinó pese a los momentos lindos que hayas vivido con él.
-Jenny pensá en Patrick, ese chico te adora, es bueno, tiene un gran futuro, le vas a destrozar el corazón.
-Estoy muy confundida.....-comenzaron a caerle algunas lágrimas -¡Mierda! ¡Ya estoy llorando!
-Tranquila, pensalo con la cabeza en frío.
-Eso haré, gracias por todo.


Se encerró en su pequeño laboratorio montado en la casa. Buscó los rollos y rollos que tenía. Era el momento de revelar las fotos.
La puerta se abrió lentamente y apareció George.
-Evy, teléfono para vos.
-Gracias George.
El chico cerró la puerta. Suspiró, algo molesta. Todavía no entendía qué les había pasado a George y a John. Después de su escenita de celos, pasaron casi dos días sin hablarle, dos días donde se comió la cabeza, se llenó de culpas y enojos, y ellos parecieron de los mas tranquilos. Y después, volvieron a hablarle, y a besarla, y a todo. Y ella no podía resistirse, ni poner una objeción. A veces pensaba que tenían la capacidad de dominarla sólo con la mirada.
-Hola....-dijo cuando se puso al teléfono.
-Soy Murray, del instituto de fotografía.
-Ah, hola señora Murray.
-Quería saber si ya tenía las fotos para al exposición.
-En este momento comenzaba a revelarlas....
-Tiene tiempo para traerlas hasta la semana que viene. Que no sean mas de 100, hay muchos que compiten por un lugar.
-De acuerdo...-respondió dudando, no sabía eso de “competir”. Pensaba que cuando le había ofrecido hacer eso ya tenia el lugar asegurado.
Se despidió y colgó con algo de desilución.

La semana pasó demasiado rápido, debía buscarse el tiempo para encerrarse y seguir revelando fotos a veces hasta altas horas de la noche.
Cuando al fin terminó, eran mas de 300. Comenzó una selección muy meticulosa, descartando lo que le parecia mediocre, ordinario, o simplemente malo. A la vez pensaba que eso de “competir” no le iba. Era una época donde todo el mundo sacaba fotografías, era casi pasión en todos, y ella no era una profesional en el ámbito artístico, así que no consideraba que llegaría a la exposición.
Luego de terminar la selección, contó lo que tenía: 200. Ya estaba cansada, así que, bostezando, salió del pequeño cuarto.
-Chicos....-los cuatro dejaron de mirar televisión y leer revistas -¿Podrían venir?


-¿Que hagamos qué? –preguntó Paul, sorprendido.
-Que seleccionen las que le parecen mejores
-¡Pero son un montón! –exclamó Ringo, tratando de abarcar con su mirada la cantidad de fotos dispersas y colgadas por todo el cuarto.
-Hay 200. Les daré 50 a cada uno, al azar. Traten de reducirlas a la mitad.
-O sea....¿que de 50 elijamos sólo 25? –preguntó John –Es imposible.
-Es posible, se los aseguro.
-¡Todas son muy buenas! Y te lo digo yo, que tengo ojo de fotógrafo –dijo George.
Eva juntó y contó las fotos, formando cuatro montoncitos de 50 fotos, y se los dió.
-Tienen dos días para hacer la tarea.


Luego de esos dos días, John golpeó con insistencia la puerta.
-Mmm..¿quién es? Pase....-respondió somnolienta -¡Ringo! ¿Qué hacés en mi cama?
-Dormía....
-Hora de levantarse –dijo John entrado –Veo que tenés compañía.
-John, buen día. Ringo ¿por qué no me avisaste que estabas acá? Esa costumbre que tienen de meterse sin decir nada...
-Señorita maestra, acá le traigo mi tarea. 25 fotos.
-Gracias John. Ringo....
-Uy ya voy, ya me levanto, hola a todos –se incorporó, rezongando.
-¿Terminaste tu tarea, Starkey? –preguntó John.
-Eva estaba dormida.
-¡No me refiero a eso, idiota! ¡Te hablo de las fotos!
-John, es temprano para que andes a los gritos.....Y si, ya tengo las fotos.
-Chicos, por favor, váyanse que me quiero levantar.


Mientras desayunaba, desparramó las fotos sobre la mesa, bajo la atenta mirada de los chicos.
-Fue un trabajo insalubre –dijo George –Una pena descartar algunas muy buenas.
-Quedan para la exposición que viene.
-Ojala haya “exposición”, Paul.
-Ay Eva, seguro entrás.
-Me estoy arrepintiendo un poco....
-No seas tonta Vicky, vas a ver que sí. Estaría bueno que te dedicaras sólo a esa cosas. Es mas independiente y no dependés de horarios de trabajo.
-Mmm....no sé, John. Es un mundo del que no sé nada. Bueno, les agradezco su colaboración, señores. Serán bien recompensados.
Metió todas las fotos en un sobre color madera y escribió los nombres de Murray y Scott, los directores del instituto. Antes de entrar a trabajar, dejó el sobre en la recepción, con pocas esperanzas.


-EVAAA!!!! –el grito desaforado de Ringo la hizo saltar de la silla. Se puso de pie, enojada.
-¿Qué mierda pasa?
-¡Teléfono! ¡Y son del instituto ese!
Corrió hasta el teléfono y le quitó el auricular de las manos. Sin embargo, cuando se dispuso a hablar, tuvo miedo. Miró a Ringo, que le sonrió, tranquilizándola.
-Hola....
-¿Señorita Shells? Soy la señora Murray.
-Hola señora Murray, ¿cómo le va?
-Muy bien, recién terminamos de ver su trabajo. En diez días la quiero en la inauguración de la exposición. Su trabajo es muy bueno.
Apenas pudo reprimir un gritito de emoción, y se despidió, agradeciéndole a la mujer. Ni bien colgó, se abalanzó sobre Ringo.
-¡Estoy en la exposición! ¡Entré!

2 comentarios:

  1. Ahaha qué bien que subiste! Llevaba bastantes ganas de leer y bueno, eres de las pocas que no han aplazado sus fics por estos días :)
    Bien, a Dave lo estoy empezando a odiar con sus cuentitos. Bueno, quizá en parte sea cierto, pero Eva no es ninguna groupie! Lástima que la pobre está terminando creyendo eso.
    Y wow, el regreso de Joseph no me lo esperaba en lo absoluto!
    Y qué bueno que la aceptaron en la exposición, no estaría nada mal que cambiara de trabajo, así podría tener más tiempo con sus chicos :3
    Un saludo!

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  2. Biennnn! Por fin te puedo comentar, ole y ole! XD Ya tenía un montón de ganas de leer este fic, que como dices, lo tenías ahí abandonadito, que lo oía yo llorar por las noches, sollozando "María es mala y no me deja salir, ¡no me deja!" Y me daba una pena el animalico éste ahí venga llorar y llorar que quería ver la luz del sol... XDDD Ahora ya, fuera de coñas, pues eso, que me pongo con el comentario. Bien, por fin se acabó la p.... gira y lo de los anónimos afortunadamente parece que ha sido cosa de los gilis de los de los hoteles. Que con su bella y larga lengua, lo único que haría yo sería alargársela aún más y metérsela por el culo (vale, vale... tranquilízate, Cris, que estás de un violento que cualquier día matas a alguien... jajajaja). Pero joder! Es cierto! A ver si así notan como sabe la mierda que ellos echan por esa linda boquita! (de nuevo, tranquilidad, respira, Chuck! Sal del cuerpo de esta cándida e inocente persona! XDDD ).
    Jejeje, volvió al trabajo y me alegro de que el jefe no le pillara la "mentirijilla". Y reencuentro con la gente que quiere y... con la que quiere menos. Joer, con el Joseph éste! La verdad es que no me esperaba para nada que volviera a salir por aquí! Qué cara más dura que tiene el tipajo éste! Anda! Ahora espera que la buena de Jenny vuelva a él arrastrándose como si no hubiera pasado nada! Encima ahora que tiene a Patrick con el que le va tan bien y todo eso... Pffff, que mal. Espero que ella se lo piense y que no caiga, por muchas dudas que tenga y todas esas cosas. Porque si no, yo ya no respondo de mí. Me vuelvo a violentar y pillo al Joseph ese y lo meto en una licuadora! XDDDDDD
    Ainsh, al que me dieron ganas también de ensartarlo como a un pollo y meterlo en uno de esos aparatos donde hacen pollos asados que ruedan y ruedan es al Dave-su-puta-madre-Davis. Pero qué se ha pensado? Qué tiene derecho a dárselas de listillo o qué? Y qué más da si Eva se acuesta con quien le dé a ella la real la gana? Tiene algún problema? Pues si lo tiene, que se estampe contra la pared y acaba antes. Y otra pregunta... Por qué razón Eva no le hizo tragar la cámara de un bocado? Bueno, sí, eso es fácil de responder: porque la cámara es demasiado valiosa... XDDD
    Siguiente, los chicos. Awwww, son un amor, aunque a George y a John les dé por ponerse celosines... Menos mal que les pasó, pero aún así, mal... Es cena de chicas y eso se tiene que respetar... Estos chicos! Aquí el más comprensivo, el Ringachou, que se mete en su cama y todo cual osito de peluche, jajajajajaja. Y me mató su comentario de que "Eva estaba dormida" XDDD Joer, si me he reído ahí! XD
    También me mató EVa mandándoles deberes a los cuatro chavales éstos... XD Ale, ya que estáis libres y sin gira, a trabajar y a seleccionar fotos, figuras! XD Y George, dándoselas de gran fotógrafo (que sí que lo era, por cierto, jejeje), qué genio! Bueno, por lo menos, eligieron bien las fotos porque... LA HAN SELECCIONADO!
    Espero que las cosas le vayan genial en esa exposición y que se pueda dedicar a lo que realmente le gusta!
    Ale, genia! Voy camino del de Mercy que aún te debo un comment! ME hará falta un gps? Jajajaja. BESOS!

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